Carta de Joaquin, docente chileno en su experiencia de intercambio en Argentina.

A lo largo de mi vida, he tenido un enorme interés y la fortuna de experimentar la diversidad cultural y aprender de personas maravillosas de diferentes partes del mundo. Mi experiencia con la organización AFS ha sido un regalo invaluable que me ha permitido sumergirme en nuevas culturas y conocer personas excepcionales, llenas de cariño y empatía. A través de esta breve reflexión, quiero expresar mi sincero agradecimiento a AFS por esta oportunidad transformadora.

Mi viaje con AFS me llevó desde Chile hasta Argentina, dos países hermosos y fascinantes en América del Sur. Desde el primer momento en que llegué, fui recibido con los brazos abiertos por mi familia anfitriona argentina, que me acogió con calidez y amabilidad. A lo largo de mi estadía, experimenté la riqueza cultural de Argentina, aprendí sobre sus tradiciones, costumbres y sabores únicos. La empatía y el cariño de la gente que conocí hicieron que mi viaje fuera aún más enriquecedor.

Al mismo tiempo, no pude evitar notar algunas diferencias en el sistema educativo entre Chile y Argentina. En Argentina, me sorprendió gratamente la inclusión de clases de Educación Sexual Integral en el currículo escolar, lo que demuestra un compromiso con la educación integral de los estudiantes. Junto con esto, me sorprendió gratamente la gran importancia, a diferencia de Chile, que el sistema educacional argentino le entrega al aprendizaje del inglés, reconocido como una habilidad fundamental en un mundo cada vez más globalizado. Sin embargo, también observé similitudes en ambos países, como las marcadas diferencias en la infraestructura y el plan de estudios entre las escuelas públicas y privadas, lo que resalta la necesidad de abordar las desigualdades educativas.

En el aspecto social, noté algunas diferencias en la forma en que se utilizan las calles y el respeto al peatón. En Argentina, las calles a menudo parecían caóticas y había menos consideración por los peatones en comparación con Chile, donde la prioridad del peatón es más evidente. Sin embargo, las y los argentinos valoran enormemente la puntualidad y el conocimiento de su propio país y territorio, lo que refleja un profundo sentido de identidad y orgullo nacional.

En resumen, mi experiencia con AFS ha sido un viaje inolvidable que me ha brindado la oportunidad de conocer nuevas culturas y personas excepcionales en Argentina. A través de mis vivencias en este país, he aprendido sobre las diferencias y similitudes en la educación y la vida social, lo que me ha enriquecido y ampliado mi perspectiva. Agradezco a AFS por esta experiencia que ha dejado una huella imborrable en mi vida y que seguirá inspirándome a ser un ciudadano del mundo comprometido con la comprensión y el respeto entre culturas.

Joaquín Cuevas Vázquez.

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